Revista En Torno a la Prevención, No. 21, diciembre. 2018, pp.
23-29
ISSN 1659-3057 • E-ISSN
2215-3845
Url: www.relaciger.org/revista/
RM-GIR UNA IDE MESOAMERICANA
COLABORATIVA PARA LA GESTIÓN DE SERVICIOS EN PREVENCIÓN DE DESASTRES Y ANÁLISIS
DEL DESARROLLO SEGURO
Douglas
Salgado Duarte
CNE. Unidad de Investigación y Análisis del
Riesgo
Resumen
La Red Mesoamericana para la Gestión Integral de
Riesgos (RM-GIR), permite que el acceso y calidad de los datos territoriales sean útiles y necesarios para
reducir el impacto de los desastres. Compartir información geográfica bajo el
concepto de geo información generalizada mediante una red bajo un sistema
regional colaborativo es lo que el RM-GIR intenta constituirse. En el cual, las
herramientas geoespaciales permitan la adecuada difusión y el uso eficaz de la
información donde el aprovechamiento de las colecciones de datos e información logra
transformar, usan y usufructúan el territorio, el ambiente y el ecosistema en
general. Es una investigación con enfoque cualitativo, propia, descriptiva, con
estricto orden documental, que sustenta el artículo.
Palabras clave: Prevención de desastres; Sistemas de información geográficos; Redes
colaborativas
Abstract
RMGIR and access and quality of
territorial data are useful and necessary to reduce the impact of disasters.
The sharing of geographical information by means of a network under the concept
of generalized geoinformation is what the RMGIR intends to establish under a
collaborative regional system.
In which the geospaciakes tools allow the adequate diffusion and effective use
of the information where the use of the collections of data and information
manage to transform use and enjoy the territory, the environment and the
ecosystem in general.
Keywords: Disaster prevention, geographic information systems; collaborative network
Introducción
El presente
siglo tiene retos de grandes dimensiones para Mesoamérica, ya que cuenta con
una población superior a los doscientos veinte seis millones y una superficie
mayor de 3.65 millones de km2 y su posición geográfica estratégica.
Esta región del planeta presenta tareas desafiantes en materia política,
económica, social y ambiental. Y con una necesidad apremiante, la visión
colaborativa entre todos los actores del desarrollo para resolver los retos
vinculados a la Agenda 2030 y los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible. Donde
la articulación de esfuerzos de cooperación, desarrollo e integración entre los
países de Mesoamérica es necesaria con el objetivo de mejorar la calidad de
vida de los ciudadanos de la región.
Sus habitantes poseen
conocimiento sobre la geodinámica externa (inundaciones, deslizamientos, flujos
de lodo, etc.) y la geodinámica interna (volcanes, terremotos) que han causado
desastres a un alto costo, tanto en vidas como en el impacto anual de pérdidas
con repercusiones significativas en el Producto Interno Bruto (PIB) de cada
país, las pérdidas mayores están siendo estimadas por diferentes grupos de
trabajo en el eje de cambio global antropogénico. Para enfrentar estos desafíos
es imperativo que los actores sociales, económicos, políticos, y la sociedad en
su conjunto, tomen conciencia sobre la magnitud y los impactos por causas de
los riesgos a desastres que ha tenido la región en las últimas décadas y que
analicen las lecciones aprendidas.
De las cuales surgen
acciones conjuntas de múltiples actores, inmediatas y con visión de largo plazo,
con la finalidad de garantizar el desarrollo seguro, evitar la pérdida
periódica de infraestructura estratégica y no hacer inútiles los ecosistemas
que han sustentado muchas de las actividades económicas de la región.
De acuerdo con el Estado
de la Región (2016), en referencia a Centroamérica, esta presenta un marco de
alta vulnerabilidad social, exposición de la población; mala ubicación y
calidad de las viviendas y la infraestructura. Los sismos son un importante
factor de riesgo de desastres; en el período 2010-2013 se incrementaron y causan
pérdidas y daños que afectaron a 2.451.492 personas en toda la región
(exceptuando Belice).
Por otra parte, la
dinámica de la población muestra una tendencia a concentrarse en áreas urbanas.
El mismo informe hace referencia que en el período 1970-2013 hubo una acelerada
concentración de población en centros urbanos. En Costa Rica y Panamá, el
incremento fue mayor (32,2% y 28,4%, respectivamente) y en 2013 más del 70% de
sus habitantes estaba asentado en centros urbanos.
La afirmación
en el Sexto Informe del Estado de la Región. En Centroamérica los desastres son un severo obstáculo para el
desarrollo humano y, a la vez, el resultado de procesos fallidos de desarrollo,
pues deriva de la vulnerabilidad socialmente construida, que facilita el
impacto de los fenómenos naturales”.
Por tanto, uno
de los esfuerzos que requerirán persistencia y mejora continua será reducir las
brechas en el acceso para una amplia gama y variedad de actores sociales el
acceso a la información sobre las condiciones climáticas (nubes, lluvias,
vientos, presión atmosférica); sobre la dinámica natural imperante en la región
sobre sismos, tormentas o huracanes en desarrollo, incendios forestales de gran
escala; y por otra parte disponer en un formato continuo (24 horas/7 días a la
semana) de los escenarios regional o locales de impacto según los tipos de amenaza.
No obstante, a
pesar de los avances logrados en tecnologías de adquisición tanto por medio de
datos físico-naturales terrestres; denominado como geo-información, como de la dinámica de actividades humanas tales
como, como el transporte, tráfico automotor, turismo, etc., persisten todavía vacíos
significativos de data información para anticipar los desastres, mayor aun
cuando se requiere consulta información sobre la exposición al peligro que se
encuentra una localidad determinada.
A pesar, de los
vacíos que prevalecen en materia de acceso, disposición y calidad de datos
territoriales para toma de decisiones útiles y efectivas en reducir el impacto
de los desastres, avances y esfuerzos en la región podrían respuesta a varias
de las interrogantes anteriores; a través del uso intensivo de geo-información
y geo-servicios, siendo en la actualidad los útiles y apropiados nuevos
procesos conocidos como IDE, infraestructura de datos espaciales.
De acuerdo con
Iniesto y Nuñez (2014) las IDE se entienden como “como sistemas basados en la
apertura de servicios estandarizados, accesibles a través de la red, en
entornos abiertos, amigables y usables, que proporcionan una infraestructura
libre y generalista, que tienden a la máxima difusión, aprovechable por todo
tipo de usuarios, incluso sin un alto grado de especialización, para sus fines
particulares”.
En el
desarrollo de una IDE, cuanto más abierta, sana y colaborativa sea la
comunidad, mayor calidad tendrá la información. (Iniesto y Nuñez, 2014). Los
autores señalan que una comunidad IDE está integrada por un conjunto de actores
(productores de datos, proveedores de servicios, intermediarios, usuarios,
desarrolladores de software, proveedores de hardware, investigadores, etc. que
establecen por consenso las reglas del juego para compartir información
geográfica en la red.
Red Mesoamericana en Gestión Integral del Riesgo
La Red
Mesoamericana para la Gestión Integral del Riesgo (RM-GIR) se constituyó el día
7 de marzo del año 2014 en la Ciudad de Santo Domingo, República Dominicana. Es
el resultado de la evolución del Sistema Mesoamericano de Información
Territorial (RM-GIR) en el marco del Proyecto de Integración y Desarrollo de
Mesoamérica y surge como una iniciativa de cooperación que facilita la
construcción de consensos, la articulación de esfuerzos de cooperación y la atracción
de recursos para fortalecer los procesos de integración y desarrollo
mesoamericano.
Se establece en
la región para el fortalecimiento de las capacidades de las instituciones
relacionadas con la gestión del riesgo y protección civil, mediante una plataforma
geoespacial que facilita el intercambio de información sobre amenazas,
vulnerabilidad, riesgos y el cambio climático.
Se encuentra
conformada por la representación de los países como Belice, Colombia, Costa
Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, República
Dominicana, los cuales tienen sus coincidencias en la materia de estudio.
Propósito de la Red
Mejorar la
capacidad de análisis del riesgo provocado por los fenómenos naturales.
Incorporar
información como una herramienta y un indicador para el desarrollo
socioeconómico de los países en la región centroamericana y desarrollando una base
de datos interactiva y una cartográfica a escala Regional, en donde se
incorporan los sistemas nacionales de información de riesgos.
Visto de esta
forma, la Red Mesoamericana de Información para la Gestión del Riesgo, se
acerca en un alto porcentaje a constituirse como IDE Regional especializada con
una cobertura a miles de usuarios.
Por otra parte,
dicha iniciativa evoluciona del concepto de geo información generalizada a una
red interoperable, multiusuario, escalable con estándares en aspectos de
desastres e información geográfica, cuyo impacto social inmediato será la
disposición de fuentes confiables y accesibles sobre variados escenarios de
riesgos a desastres.
Aunque ya la
región cuenta con importantes bancos de datos en geo-información o de información
geográfico en aspectos clásicos de amenazas naturales como vulcanismo,
sismicidad, deslizamientos, inundaciones, sequía, alcanzados en la era
post-huracán Mitch (1999). Resulta imperioso fortalecer procesos para el uso
intensivo, inteligente expedito, accesible geo-información para contribuir en
la reducción regional del riesgo.
Luego, la RMGIR
deberá centrar sus esfuerzos en uso extendido y divulgación, hacia actores sectoriales, institucionales, sociedad civil y
grupos de población con alta propensión al impacto de los desastres en
Mesoamérica.
La
distribución, uso y circulación de información se ve afectada no sólo por
limitantes tecnológicas, a su vez por procesos burocráticos y culturales puesto
que en gran parte de los países mesoamericanos, es restrictiva en cuanto al
acceso y uso, lo anterior aunado a la ausencia de mecanismos y procesos que
potencien un uso apropiado e interpretación de la geodata e información actual
con fines preventivos y preparativos, da como resultado una adecuada toma de
decisiones en búsqueda del desarrollo con la menor exposición posible al
desastres, en especial, en sectores productivos o en aquellos muy sensibles a
la economía y a la vida los denominados líneas vitales tales como: energía,
telecomunicaciones, infraestructura , agua, salud, entre otros.
En consonancia
con un sistema regional colaborativo con procesos horizontales, la RMGIR como
IDE sumará los esfuerzos en el conocimiento e indicadores de estado sobre la dinámica
de riesgos en la región, posibilitando en el mediano plazo, construir acervos
de información histórica, en referencia al registro de eventos de desastres
para su uso por diferentes grupos de trabajo y actores en múltiples sectores,
pasando por el económico y social hasta el ambiental.
Por otra parte,
es posible que exista una subestimación de la información sobre recursos
naturales y ambiente, sobre su verdadero
potencial como herramienta de cambio y de modificación de las condiciones de
vulnerabilidad y presión existentes para garantizar elementos
constitucionales acceso un ambiente sano y ecológicamente equilibrado; esto probablemente
debido a la falta de visión para fortalecer las capacidades técnico-científicas
existentes y a la carencia de una estrategia nacional robusta y participativa
para el fomento en el desarrollo de habilidades y destrezas en áreas vitales de
la geo-información.
Con gran
extensión y mayor uso de las tecnologías de Sistemas de Información Geográfica
y Sensores Remotos, mayor accesibilidad de datos en tiempo real de tipo
satelital (como imágenes Radar, Landsat, Ikonos. Quickbird ) o estrictamente de
variables ambientales, así como el acceso a tecnologías de bajo coste o
accesible para administrar, manipular, desplegar y analizar información
geográfica y de amenazas, caso de la tecnologías abierta (GNU) como Quantum
GIS, ILWIS, SAGA, GvSIG, entre otras.
Aunque en los
últimos años han aparecido iniciativas nacionales y regionales en capacitación
técnica para en los niveles productores de información o de procesos tendientes
al aprovechamiento de la información de usuarios finales, todavía hace falta
articular y cohesionar un proceso regional en esta materia, especialmente en lo
referente al uso y aplicabilidad de geo-información en el sector de recursos
naturales aplicado a la valoración y evaluación ambiental.
Desde esta
perspectiva, surge la necesidad de fortalecer la formación académica en sistema
de información en geo-información bajo un software libre distribuido, es decir,
consolidar la formación de carreras en ciencias de la tierra y naturaleza hacia
procesos abiertos y colaborativos, con la finalidad de acrecentar la generación
y producción de datos e información territorial con fines sociales o fines
país.
Este proceso de
creación de capacidades de información vigente y actualizada sobre la dinámica
de riesgos a desastres potenciales y su monitoreo, al menos debe contener los
principios de red sustentando en lo colaborativo y en su meta de difundir y
divulgación información tipo información geográfico, válida, necesaria,
eficiente y útil con el propósito de minimizar el riesgo a desastres.
IDE regional y sus características
En consecuencia,
la RMGIR, representará una IDE regional altamente colaborativa. “Una IDE está formada por una colección de
componentes, algunos institucionales (intangibles) y otros tecnológicos
(tangibles). Partimos de que la configuración básica de una IDE es una red,
pero –no se trata únicamente de una red desde la perspectiva técnica, sino también
de una red colaborativa de personas: proveedores de datos, consumidores,
intermediarios (brokers), etc. Por lo tanto el componente clave y absolutamente
necesario en una IDE es la colaboración”. Granell, C, (2011). Para lo que requiere
de elementos claves para su funcionamiento que se describen a continuación:
·
Poseer buena calidad de datos e información: significará contar con una
garantía confiable como soporte a la toma de decisiones sobre el territorio y
ambiente, certera, con una efectiva reducción de la incertidumbre al aproximar escenarios
ambientales a escalas de gran detalle, y agregar mayor criterio a diferentes
tomadores de decisión para precisar la vulnerabilidad ambiental y la presión
sobre ecosistemas de alta sensibilidad y estratégicos. Es necesario contar con
información confiable y que de mayor inversión en el levantamiento sistemático
de datos.
Como país
es preciso y valioso contar la información de calidad, de cada uno de las
instituciones responsables en variables del territorio y ambientales, integrada
a un sistema nacional que redundará en insumos de importancia estratégica en
otros sectores claves para el desarrollo en general, al igual que el fomento de
credibilidad y confianza sobre temas sensibles como los Índices de Fragilidad
Ambiental (IFA) por ejemplo.
·
Poseer una garantía de
acceso, uso y disponibilidad de información: significa una
transparencia, equidad e intercambio irrestricto. Es necesario armonizar
conceptos, estándares y normas de datos e información de amenazas,
vulnerabilidad y riesgos. Aunque ya existen iniciativas como IDE, será
necesario iniciar con procesos de estandarización en cartografía temática,
recursos naturales, y ambiente, no solo en aspectos de simbología, metadatos,
sino en la certificación en los niveles de confianza y validez hacia otros
usuarios que no son especialistas, pero que requieren de esta información a
nivel municipal o comunitario.
Uno de
los temas primordiales que deberá trabajar las instituciones señaladas será la certificación
de los mapas ambientales a escalas detalladas, así como generar los criterios para una certificación uniforme. Ello
con la finalidad de propiciar la toma de decisiones oportunas y efectivas, en
todos los niveles. Este tema requerirá procesos de negociación y concertación
técnica, de manera que las instituciones cuenten con estándares de
certificación normados y ratificados, así como plataformas GNU versátiles y
confiables.
·
Transferir información, y
potenciar uso prácticos y aplicaciones en el diagnóstico y calidad del ambiente: la experiencia de Costa Rica
indica que los sectores vulnerables, la población que por su condiciones de
pobreza o carente de los medios idóneos de calidad de vida no está incluida en
el proceso de intercambio de datos; y la información que se aboca a investigar
sobre estos sitios recurrentemente afectados en los IFAS, pocas veces o casi
nunca este sector social se les integra para el entendimiento de los distintos
escenarios ambientales, y menos aún se propician procesos de aprendizaje para
el entendimiento y difusión de los contenidos sobre la fragilidad ambiental
existente , por el contrario, existe una tendencia a considerar esta población
como sujetos
pasivos, ajenos a procesos de información, los cual los invisibiliza o
los excluye.
El rol de
actor municipal es clave en el proceso de divulgación y uso de información el
cual podría iniciar (en algunos ya ha iniciado) donde las municipalidades bajo
plataformas de SIG abiertas, permitan el intercambio de información espacial
horizontal.
Conclusión
En la
actualidad resulta impostergable establecer procesos y mecanismos que garanticen
el acceso, uso y divulgación de los datos y resultados derivados de los
esfuerzos de organismos serios en el estudio de los recursos naturales y el
ambiente, para a su vez potenciar su uso por sectores claves y de la
participación de las poblaciones vulnerables en el proceso de conocimiento, lo
anterior basado en la premisa de que quienes conducen sus destinos o
intervienen con sus decisiones en el entorno o territorio, tanto en lo social
como en lo económico, deben facilitar el acceso de tales decisiones, para lo
cual los SIG, Internet, y los servicios públicos denominados en la “nube” o
Cloud Resourcing potencian ser los nuevos aliados.
No basta con promover
la utilización o desarrollo de las herramientas geoespaciales, sino por el
contrario, es urgente la adecuada difusión y uso eficaz de la información generada.
Podemos contar con colecciones de datos e información, pero de nada sirven si
no son aprovechados por aquellos quienes cotidianamente transforman, usan y usufructúan
el territorio, el ambiente y sus ecosistemas en general. Lo cual es una de las
pretensiones de la IDE mesoamericana.
El reto es
lograr la consolidación de los sistemas de información geográfica (SIG), de la
Red Mesoamericana para la Gestión Integral del Riesgo (RMGIR), como un
instrumento de planificación del desarrollo que permita: 1. conocer el posible
el impacto de amenazas, 2. establecer la vulnerabilidad existente en diversos
sectores y 3. generar políticas públicas para la reducción del riesgo de
desastres en la región Mesoamericana.
La IDE son
útiles en diferentes áreas tales como: cultura, estadística, finanzas, geo
ciencias, entre otras, para la disposición y accesibilidad a los datos, su uso
y distribución con participación universal mediante sus componentes:
estándares, políticas, datos, y tecnología.
Referencias bibliográficas
Red Mesoamericana para la Gestión Integral del
Riesgo (RMGIR). (2018). Red Mesoamericana para la Gestión Integral del Riesgo.
Recuperada de: http://rmgir.cenapred. gob.mx/
Proyecto Mesoamérica (2018). Proyecto
Mesoamérica. Recuperado en http://www. proyectomesoamerica.org/
Colombia. Ministerio de Relaciones Exteriores.
(2018). Proyecto Mesoamérica. AasRecuperado de: http://www.cancilleria.
gov.co/international/ consensus/mesoamerica
México. Secretaría de Medio Ambiente y Recursos
Naturales; Ríos, E.; Cotler, H.; González-Mora,I. y Galindo, A. (2013). Cuencas
hidrográficas: fundamentos y perspectivas para su manejo y gestión. México :
SERMANAT
Proyecto Mesoamérica.
(2017). XVI Cumbre de Tuxtla. Recuperado de: http://
www.sre.gob.hn/Revista%20Proyecto%20 Mesoam%C3%A9rica%20-%20XVI%20
Cumbre%20de%20Tuxtla.pdf